Una quiche en nuestra cocina aparte de aportarnos tiempo nos da prestigio ante nuestros comensales, ya que a su rápida elaboración hay que sumarle cómo queda en la mesa y en el paladar.
La quiche es una elaboración que no falta en nuestro recetario de verano particular. Hemos hecho quiches de todo tido, de sobrasada y orejones, de beicon y champiñones, con espinacas y piñones, de guisantes y salami al tartufo, de salmón de setas... Aunque en esta ocasión hemos preparado una Quiche de cecina con queso brie a la que hemos aderezado, a la hora de su degustación, con unas hojas de romero y un hilo de miel. ¡La combinación no ha podido ser mejor!
Cuando preparamos en nuestra cocina bizcochos, solemos poner entre sus ingredientes algún tipo de fruta para que le aporte mayor jugosidad, como en este Bizcocho de melón. No es que busquemos su sabor, que algunas frutas si que se lo dan, buscamos un matiz, un aroma, un "algo" que nos haga del bizcocho, una elaboración "especial". Y si encima le ponemos una cobertura como esta de queso mascarpone y melón, el resultado puede ser excepcional.
Los pimientos rellenos son de esas recetas que no solemos hacer muy a menudo y cuando la elaboramos nos preguntamos ¿por qué hemos tardado tanto en hacerla? Esa misma pregunta nos hemos hecho cuando hemos probado estos Pimientos rellenos de gambas y merluza. Una receta que nos puede servir tanto para el día a día como para una ocasión especial. Y lo particular de ella es la salsa con la que hemos acompañado estos Pimientos rellenos de gambas y merluza. Una salsa a base de mayonesa, pimientos del piquillo y mermelada de frutos rojos. Una combinación de lo más aconsejable.
Levantad la mano quien no tenga en su despensa o nevera uno o más calabacines. Una, dos, tres, cuatro personas... A estas alturas del verano raro es el hogar que no tenga en estos momentos un calabacín. Y es que este año han sido muchos los familiares, amigos o vecinos que les han dado por plantar en su patio, corral o balcón su huerto particular con, entre otras verduras, cebollas, calabacines, tomates y pimientos.
Aprovechando unos restos de pollo asado que preparamos ayer, hemos elaborado esta deliciosa receta: Hojaldre de pollo con queso y calabacín.
Una receta muy "light" en la que hemos sustituido la típica bechamel por un puré de calabacín sin apenas nada grasa que ha dado un toque "dulzón" a este pastel hojaldrado de pollo.
Estos Vasitos de chocolate son verdaderamente deliciosos, tienen una textura entre mouse de chocolate y una crema de chocolate tipo a las que venden en cualquier supermercado y de muchas marcas. Un dulce que es ideale para presentar como postre en cualquier celebración, comida, merienda o cena, y por qué no, tomarnos uno cuando se nos antoje.
Las Quichés, tartas o pasteles salados, son elaboraciones que para nosotros son indispensables en verano ya que son muy fáciles de hacer y aceptan todo tipo de ingredientes, como en esta Tarta salada de boletus. Además son ideales para "reciclar" las típicas verduras o productos que se nos quedan arrinconados en la nevera y no sabemos muy bien cómo dar salida. Para la Tarta salada de boletus que os mostramos hoy hemos utilizado unos boletus frescos (que se pueden sustituir por cualquier otro tipo de seta) y un par de filetes de ternera que teníamos en la nevera, además de unos huevos y un poco de nata.
Esta receta es de esas “facilonas” que sorprenden tanto a invitados como a la propia familia. Nos sirve tanto para postres dulces como para cualquier otro plato con carne o pescado, dependiendo en todo momento del relleno que le metamos.
La receta de Tarta de chocolate y Nutella es una adaptación de la famosa Tarta Nutella de Nigella Lawson, que si bien es una bomba calórica, para que engañarnos, es pura delicia. Aunque sólo con un pedacito, si somos capaces de ello, descubriremos por qué esta tarta se ha hecho un hueco entre las mejores recetas de tartas de chocolate. Apta solo para verdaderos amantes del chocolate.
El Flan de queso casero podemos prepararlo en moldes individuales o, como a nosotros más nos gusta, en un molde...
Estamos acostumbrados a preparar bizcochos de tamaño familiar, vamos de los de toda la vida. Ya sean redondos, cuadrados o rectangulares. Pero siempre de meter el cuchillo, cuando no es a pellizcos, para obtener un buen trozo que llevarnos a la boca. El otro día buscando un molde redondo (grande) para hacer un bizcocho me topé con unos moldes para tartaletas que tenía arrinconadas en el cajón. Me pareció un tamaño perfecto para hacer unos "bizcochitos". Dicho y hecho. ¡Lo tienen todo! Esponjosos, con el toque que le aporta la mantequilla y el aceite de oliva virgen extra, las nueces y sobre todo el sabor de la ralladura de limón y el tomillo fresco.






















