La palabra alcachofa parece ser que viene de un término árabe que significa "lengüetas de la tierra", en referencia a sus características y singulares hojas, y precisamente fueron los árabes quienes introdujeron su cultivo y consumo en Europa. Desde entonces la alcachofa se ha hecho un hueco en los recetarios de los países de la cuenca del mediterráneo y como pasa con la mayoría de los productos buenos, la alcachofa tiene muchas formas de elaboración y todas muy buenas. Da igual que se elaboren como guarnición de otros platos o bien como plato principal, fritas, rebozadas, asadas o cocidas. En este caso hemos realizado una receta fácil y sencilla, sin apenas complicaciones, como son estas alcachofas rellenas de jamón ibérico.