Esta receta de tarta de queso clásica de Estados Unidos, tiene la textura cremosa y suave del queso philadelphia, el crujiente de la galleta y el contraste dulce de la mermelada. Es el postre perfecto para una comida o merienda.
La tarta de queso es uno de los postres más comunes del mundo y, quizás, uno de los más antiguos que utilizan lácteos, diferentes de la leche.
El primer registro que hace mención a la tarta de queso viene del año 4000 a. C. aunque no será hasta el nacimiento de Marcus Porcius Cato (o Cato «el viejo»), cuando se popularice la receta en uno de sus tantos libros de cocina romana, llamados «De Agricultura».
Pero para la receta que nos ocupa, tuvimos que esperar hasta el año 1872, en el queso crema fue inventado por William Lawrence de Chester en Nueva York, que accidentalmente desarrolló un método para producirlo al intentar fabricar un queso francés llamado Neufchatel. Desde este descubrimiento, hasta su uso en la tarta de queso philadelphia, no paso mucho tiempo y paso a ser conocida como Cheesecake en Estados Unidos y a convertirse en un icono de las gastronomía norteamericana.

Tiempo de preparación | 1 hora |
Tiempo de reposo | 6 horas |
Raciones | 6 raciones |
- 80 g Mantequilla
- 100 g Nata líquida para montar 35% M. G.
- 500 g Queso Philadelphia©
- 170 g Azúcar blanco
- 2 sobres cuajada Royal
- 1 tarro mermelada de fresa
- Frutos rojos para decorar
- 200 g galletas Fontaneda Digestive
- 300 ml Leche entera
- Desmenuzar las galletas, añadir la mantequilla derretida y trabajar la mezcla. Colocarla en un molde redondo. Dejar enfriar 10 minutos en la nevera.
- Por otro lado, poner a hervir a fuego medio la leche, la nata, el queso Philadelphia y el azúcar. Una vez derretido todo, añadir los sobres de cuajada Royal.
- Verter la mezcla sobre la base de galletas. Dejar enfriar en el frigorífico durante 6 horas, hasta que cuaje perfectamente.
- Cubrir la tarta con mermelada de fresa y decorar la tarta con frutas del bosque. Retirar del molde y listo para degustar.
- Manteniendo una dieta equilibrada se puede consumir, de forma ocasional, una porción de este postre. Se recomienda dejar el cheesecake en la nevera durante toda la noche.